Piloto de la Carrera de Indias,
hijo de Pedro de Araujo y de Águeda Hernández, fue personaje de arraigadas creencias
religiosas, ferviente seguidor de la Orden de San Francisco en la que
profesaron dos de sus hijos. Hallándose vacante una sepultura, con asiento y arrimo,
al lado de la puerta principal de la iglesia del Real Monasterio de la
Inmaculada Concepción, de religiosos franciscanos, del que había hecho dejación
Jerónima Morel, expresó su deseo de erigir por su devoción un altar en honor
del Santo Cristo en la pared y arrimo de aquella sepultura, y la comunidad,
reunida en capítulo, le concedió data a perpetuidad para él, su mujer y
descendientes con derecho de patronazgo para que fabricara el altar; lo que
llevó a efecto según consta ante Andrés de Chávez, escribano público, el 26 de
enero de 1638; en la actualidad se conserva el nicho de cantería ubicado entre
la puerta de la iglesia y la capilla de la Vera Cruz. El fundador, el 3 de agosto
del mismo año, instituyó capellanía de una misa cantada a celebrar ante el
altar, con vísperas, diácono, órgano, sermón, procesión alrededor del claustro y
responso sobre su sepultura el día del Santo Cristo todos los 14 de septiembre.
Leonor González, hija de Gonzalo Pinto e Isabel González, con la que había
casado el 22 de abril, otorgó la oportuna escritura de dotación por habérselo
encomendado su marido. Falleció en Santa Cruz de La Palma el 29 de julio de
1646.
PÉREZ
GARCÍA, J. (2009), Fastos biográficos de La Palma, Santa Cruz de La Palma,
Edición conjunta de la Sociedad Cosmológica y Caja Canarias, pp. 46-47.
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